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Las tendencias del sector inmobiliario y su impacto en el crecimiento de las ciudades durante los últimos años requieren de una cartera o reserva de suelo apto para el desarrollo urbano. Sin embargo, ésta es cada vez más limitada, lo que origina la propagación de fraccionamientos y zonas habitacionales más alejadas de las áreas urbanas consolidadas y dotadas con mejores servicios y empleo, situación que implica el incremento de los costos de la vida para sus residentes y exige mínimos para las autoridades locales.
El desarrollo urbano y la construcción de vivienda sin una adecuada planeación han propiciado un alto déficit de infraestructura, equipamientos y servicios a nivel nacional. Derivado de esto, el Gobierno Federal ha planteado la necesidad de diseñar un esquema en el cual el desarrollo de vivienda vaya de la mano con la generación de empleos, a través de la planeación y adecuación de la infraestructura urbana necesaria, es decir, crear comunidades (crear ciudad).
Como una medida formulada para enfrentar dicha problemática, diversas instancias gubernamentales (SEDESOL, SEMARNAT, SENER, CONAVI, BANOBRAS, INFONAVIT y SHF) se han asociado para planificar, promover y evaluar los Desarrollos Urbanos Integrales Sustentables (DUIS), a partir de la colaboración entre los tres niveles de gobierno y los sectores privado y social. Por ello, se vuelve necesario que los diversos actores involucrados en el desarrollo inmobiliario del país cuenten con las herramientas teóricas y técnicas más actuales para la formulación de proyectos urbanos más completos que mejoren la calidad de vida de la población.
